sábado, 21 de febrero de 2009



Fotografía del volcán Chaitén antes de
su erupción, ubicado en linea recta con la ciudad de
Chaitén, tal como se puede observar al fondo.

Desde el mediodía del jueves 19 de Febrero se inició una intensa actividad en el cono del volcán, que finalmente colapsó y se derrumbó hacia el interior de la caldera donde arden los gases provenientes del magma que fluye desde el interior de la corteza terrestre. El material es enfriado violentamente, explota y es arrojado afuera del cráter convertido en ceniza, la cual es altamente tóxica ya que se conforma de micropartículas de un tamaño inferior al cabello humano y se puede alojar en los pulmones, pudiéndose desarrollar con los años un tumor o sufrir del mal de los mineros conocido como silicosis, el cual impide respirar y causa asfixia.
Imagen de la pluma volcánica lanzada desde el volcán Chaitén,
es una columna de cenizas elevada por el viento con dirección este. Ya alcanzó Futaleufú y provocó una lluvia de material volcánico con el cielo oscuro.
Actualmente las cenizas cruzan la Cordillera de Los Andes y alcanzan el Océano Atlántico, dependiendo de la direccción y velocidad en que sople el viento cubre de cenizas muchas ciudades del sur austral argentino.


Ubicación geográfica de Chaitén.

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Las autoridades chilenas han solicitado insistentemente a la población que aún permanece contra viento y marea en Chaitén. Es una ciudad situada a escasos 4 kilómetros de la base del volcán y que se encuentra semi-destruida por causa del desborde del río Claro que la cortó en dos y arrastró restos de material piroclastico provenientes de la misma erupción volcánica, dejando las calles y casas bajo varios metros de cenizas. Afortunadamente no han habido víctimas fatales, pero la porfiada permanencia de los propietarios de locales comerciales como restoranes, tiendas y un supermercado, intentan angustiosamente proteger la única forma de vida que conocen y no pueden aceptar que venga un volcán de la noche a la mañana y les arrebate para siempre lo que consiguieron a través de muchos años de esfuerzo y sacrificio.


Los argumentos son válidos y entendibles pero no se puede permitir que sigan allí ya que la naturaleza de los volcanes es muy violenta e impredecible, es imposible saber qué ocurre al interior de uno de ellos sino es por instrumentos que sólo los científicos instalan y conocen. Si un vulcanólogo les dice que Chaitén es inhabitable tal como está hoy, debieran resignarse y emprender la retirada, aceptar la realidad y buscar una nueva ubicación para el pueblo de Chaitén, que lo integran las familias que originalmente vivían allí. Mientras sus habitantes se encuentren a salvo el espíritu del pueblo no muere, por el contario si insisten en permanecer allí, afrontan nefastas consecuencias y en la práctica significaría el exterminio definitivo. En tal caso solamente la justicia podrá a través de las fuerzas policiales obligarlos a salir, sino es por las buenas...

Chaitén no debe morir, sus habitantes son Chaitén, no las estructuras físicas de las casas que ya están sepultadas sin remedio. Este invierno que se avecina será lluvioso y muy frío. Posiblemente el siguiente año el poblado completo habrá desaparecido por completo debido a la acción de la ceniza volcánica mezclada con agua que se convierte en una especie de mezcla de concreto, extremadamente duro y capaz de arrasar con todo. El poblado de Chaitén actualmente tal como se conocía antes de la erupción, de lo que era en apariencia un cerro cubierto con bosques milenarios y de vida silvestre ya no existe. Es un recuerdo que debe estar presente en cada uno de sus habitantes para siempre, así no lo olvidarán nunca y serán capaces de reconstruirlo en otra ubicación, conservando el nombre original aunque se ubique en otro sitio. Es la única forma de evitar que Chaitén no muera.
Una vez que esté reconstruido el nuevo pueblo (posiblemente en la localidad costera de Fandango ubicada a pocos km. hacia el norte), la gente podrá observar con más tranquilidad y desde lejos cómo un volcán pudo ser capaz de cambiar sus vidas para siempre.
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Imágenes del volcán, donde se puede apreciar como era la ciudad de Chaitén, antes y después de la erupción con su entorno cubierto de cenizas.


Fuente: www.aisen.cl - www.es.wiki.org/wiki/chaiten

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